Esta actividad está presente en varias actividades. Son contratos para asegurar el cumplimiento de una obligación.
La crisis que ha generado la pandemia y que se ha reflejado en desempleo, deterioro de la cartera de créditos, mayor riesgo de los deudores, quiebra de empresas y más digitalización bancaria están impulsando el afianzamiento, una actividad que existe en Colombia hace 20 años pero que no se ha desarrollado como en otros países de la región y en donde, según voceros del sector, falta una mayor regulación.
Una fianza es una garantía que busca asegurar el cumplimiento de una obligación. Una especie de seguro que le permite a una empresa o una persona protegerse en caso de incumplimiento del deudor, el que ejecuta un contrato o tiene bajo arriendo un inmueble.
Gustavo Rincón, gerente de Coophumana, una entidad que reemplaza o sustituye el fiador para créditos de consumo que otorgan fondos de empleados, fintech y cooperativas, dice que “esta actividad ha aumentado pues a los deudores se les ha puesto trabas en la pandemia con las garantías”. La entidad, con nueve años en el mercado, tiene convenios con 15 originadoras de crédito y cartera afianzada por $676.000 millones en 42.223 operaciones que había al cierre de diciembre del 2020.
Coophumana creció un 25% en el volumen de créditos afianzados en comparación con la operación del 2019. Siendo más del 50% créditos digitales. Además, cerró nueve negocios nuevos con aliados de todos los sectores: cooperativo, privado, fondos de empleado y Fintechs.
Dice que la entidad que dirige está tratando de combatir fenómenos como el llamado pagadiario pues además se han flexibilizado las condiciones para que algunas personas que tienen reportes negativos en centrales de riesgo por factores menores puedan volver a obtener créditos.
La afianzadora no tiene contacto directo con el deudor, pues este paga dentro de su cuota de crédito lo correspondiente a la fianza.
Afiancol es otra entidad que ofrece fianzas, con 14 años en el mercado y con el respaldo de un reasegurador internacional y afianza $350.000 millones. Juan Pablo Lozano, presidente de Afiancol dice que en Colombia hay unas 28 afianzadoras, pero señala que es necesario que se mejore la regulación del sector para que haya reglas más claras y evitar que se presenten problemas con pequeñas entidades que no tengan cómo responder ante incumplimientos grandes.
Esta afianzadora es vigilada por la Superintendencia de Sociedades bajo el modelo de inspección y según Lozano, cuando hay un incumplimiento Afiancol puede seguir pagando las cuotas o la totalidad del saldo y los recursos salen de un fondo de reserva que se ha guardado de las primas y además del capital de la compañía.
Entre algunas de las otras afianzadoras que hay en Colombia están Protecsa, dedicada al afianzamiento de cánones de arrendamiento, administración, IVA en locales comerciales, servicios públicos, daños y faltantes de inventario.
También está Unifianza, garante o fiador de contratos de arrendamiento o concesión que se realicen sobre inmuebles, constituyéndose en una salvaguarda de dichas obligaciones en el mercado desde hace más de 16 años.Otra de las grandes compañías del sector es El Libertador.
Fuente: Portafolio